Uno de los rubros más beneficiados con el uso de swap de monedas con China es el automotriz, y concretamente los importadores de autos chinos. En esa actividad pasaron de tener que trabajar con las reservas en dólares, a poder hacerlo en yuanes, cuya cotización está indexada únicamente al dólar oficial.
De esa manera, los importadores de autos provenientes de China comenzaron a trabajar hoy con un tipo de cambio de 242 pesos y con muy pocas restricciones de por medio, ya que el Banco Central puede pagar las importaciones solicitadas con yuanes, y no los escasos dólares. Todo ello gracias a que las fábricas chinas aceptan el pago en su propia moneda.
El efecto de la nueva medida posiblemente tenga un impacto fuerte en el stock de autos chinos cero kilómetro que puedan verse en las concesionarias. Sin embargo, el precio de los vehículos no sufriría grandes variaciones.