El último informe del Banco Mundial sobre energía eólica marina señala que Argentina es uno de los países con mayor potencial de Sudamérica. Con el impulso de esta tecnología -desarrollada en China, EEUU y la UE– se podría generar el 15% del consumo total eléctrico de 2019.
La International Energy Agency (IEA), ha proyectado que la industria eólica marina crecerá 15 veces en las próximas dos décadas; convirtiéndose en un negocio de 1 billón de dólares. En la actualidad, cuenta con 29 GW de capacidad instalada, el 80% de ella en Europa
En este sentido, el avance tecnológico en los aerogeneradores marinos es excepcional. Mientras el primer parque eólico marino contaba con 11 turbinas que tenían una potencia de 450 kW cada una, hoy el mayor parque eólico offshore tiene una potencia instalada de 659 MW, repartida en 87 turbinas de 8,25 MW. Otros parques cuentan con aerogeneradores de 10 MW, y recientemente una de las más importantes empresas de tecnología eólica offshore presentó un aerogenerador de última generación, con una turbina de 15 MW, que estará disponible comercialmente a partir de 2024.
Asimismo, los parques eólicos marinos pueden funcionar en mares cada vez más profundos y a mayor distancia de la costa. La tecnología actual permite instalar aerogeneradores de fondo fijo a 50 metros de profundidad, y turbinas flotantes a 100 metros, y existen proyectos de aerogeneradores flotantes a 220 metros del fondo marino. De la misma forma, los parques se han alejado hasta 60 kilómetros de la costa, y los nuevos proyectos impulsados en Alemania y Reino Unido están construyéndose a 100 kilómetros mar adentro (WindEurope Report, 2020).
La inversión en tecnología asociada a la industria también es relevante. De acuerdo con la IEA, hacia 2030 la inversión acumulada total será de 1,2 billones de dólares
La reducción de costos de la eólica marina también ha sido importante. Desde los 150 € /MWh en 2014, pasamos a un precio, en 2019, de 44 €/MWh en Francia y 40,63 £/MWh en Reino Unido (WindEurope Report, 2020). Además, la IEA proyecta una disminución de precios del 60% para 2040, y que, por tanto, será competitiva con las otras energías renovables y fósiles a partir de 2030 (IEA, 2019).
La inversión en tecnología asociada a la industria también es relevante. De acuerdo con la IEA, hacia 2030 la inversión acumulada total será de 1,2 billones de dolares. En este sentido, la energía eólica marina está asociada también con el desarrollo de hidrógeno verde, tal como lo advierte el Global Wind Energy Council (GWEC) en su anuario de 2019.
Fuente: Portal Nuevas Energías