El Representante Especial para la Promoción del Comercio y las Inversiones, Sabino Vaca Narvaja, fue invitado a la recepción de año nuevo del Banco Asiático de Inversión en Infraestructura (BAII). Allí, conversó con el presidente de la entidad, Jin Liqun. Durante la ceremonia, también disertaron el Ministro de Finanzas de China, Liu Kun, y el Vicealcalde de Beijing. Semanas atrás, el gobierno argentino, reglamentó la ley que sancionó el Congreso Nacional para el ingreso del país a esta entidad de crédito.
El evento se realizó en las instalaciones del banco, ubicadas en un zona cercana al villa olímpica de Beijing. Además, contó con la participaron de embajadores de diferentes países, importantes empresas chinas y funcionarios del Estado.
El Banco Asiático de Inversión en Infraestructura (BAII) es una institución financiera internacional propuesta por el gobierno de la República Popular China. El propósito de este organismo es el desarrollo multilateral es proporcionar la financiación para proyectos de infraestructura.
El banco fue propuesto por Xi Jinping en 2013 e inaugurado con una ceremonia en Beijing en octubre de 2014. La ONU se ha mostrado entusiasta con la propuesta china y ha señalado como “una gran propuesta para financiar el desarrollo sostenible” y “mejorar la gobernanza económica mundial”. La entidad contó inicialmente con 100 mil millones de dólares, es decir, la mitad del dinero que posee el Banco Mundial.
En una entrevista la Agencia de Noticias Xinhua, distintos expertos señalaron que, el Banco Asiático de Inversión en Infraestructura (BAII) tiene una importancia fundamental para América Latina y el Caribe porque podría ayudar a la concreción de las grandes obras de infraestructura necesarias para el desarrollo de los países de la región. Esto se debe a que “el déficit de infraestructura es evidente: los costos logísticos en América Latina y el Caribe (ALC) oscilan entre el 18% y el 35% del valor final de los productos, comparado con el 8 por ciento en países de la OCDE”.
En este escenario, la República Popular China se consolida como socio estratégico integral, producto de su crecimiento económico y su ascenso como potencia mundial. China, tiene a la soberanía alimentaria como uno de sus objetivos prioritarios, debido a su superpoblación y su escasez de agua y de tierras arables. A su vez, incrementó los ingresos medios per cápita y aumentó su tasa de urbanización. Estos elementos, permitieron el crecimiento constante del consumo de una clase media que demanda más y mejores alimentos.